Mi padre tiene una obsesión seria con mi formación universitaria, él no es médico, ni siquiera tiene una profesión parecida, sin embargo, por alguna razón está empeñado en que yo estudie medicina, a mi no me agrada esa carrera, no está entre mis opciones, yo quiero inclinarme por otras cosas, pero al parecer él solo me apoyará si decido estudiar eso, no sé qué hacer, tampoco quiero perder la oportunidad de tener una formación profesional.
¿Por qué los padres quieren que sus hijos sean médicos?
Por lo general el sueño de todos los padres es que sus hijos sean médicos, ellos siempre sueñan con que a sus hijos los puedan llamar Doctor y decir que tienen a un médico en la familia, pero también es cierto que muchos niños piensan que sueñan con ser médicos porque pequeños es lo que les emociona cuando están jugando, pero a medida que van creciendo, la realidad es otra y se dan cuenta que sus gustos profesionales son otros que no tienen nada que ver con la rama de la salud.
Si pasas por el desagradable momento de tener que decidirte porque es lo que vas a estudiar, y lo que te apasiona es otro tipo de carrera que no sea la medicina, pero tu papá te quiere obligar a estudiar esa carrera así a ti no te guste, debes tener presente estos consejos: si haces algo que no te guste o no te apasione no vas a tener éxito y no te vas a sentir feliz o realizar como profesional.
¿De qué forma le has expresado a tu padre que no quieres estudiar Medicina?
Siendo este punto tan importante, le debes hacer saber a tu padre de la mejor forma que no te puede imponer algo que a ti no te gusta. En el primer instante que tu padre te diga que debes estudiar medicina porque eso es lo que él quiere, pero tú no lo quieres hacer, de manera inmediata, pero con mucho respeto le debes responder que la medina no es la carrera que a ti te gusta.
La clave fundamental para que tu padre no te obligue a estudiar medicina es una buena comunicación, no puedes sentir miedo de comunicar y expresar esos sentimientos y gustos que tanto te gustan y apasionan porque si te quedas en silencio, vas a estudiar una carrera que le gusta a tu padre, pero a ti no, entonces no lo harás de manera profesional para ser el mejor, sino de forma obligada por compromiso.
Es muy importante que te sientes a conversar en cada momento que se presente la oportunidad con tu padre para que pueda entender que no te puede cortar los sueños por querer cumplir su sueño, recuerda que es tu tiempo y son tus estudios, es el campo laboral en donde te vas a desempeñar tú, no tu padre, eso es lo que le debes hacer entender con buenas palabras.
Porque si algo te podemos asegurar es que, si le haces ver a tu padre con palabras de que el obligarte a estudiar algo que tu no quieres, en vez de ayudarte te va a perjudicar, porque todo se trata es que puedas decir que eres el mejor en lo que haces porque te gusta para que no debas hacer algo malo por la simple razón que no te gusta lo que estás haciendo.
Hacer algo que te guste te va a abrir las puertas al futuro. En el preciso instante que le hagas entender eso a tu padre, él se va a encargar de apoyarte en lo que más te guste.
Conclusiones:
- La mayoría de los padres suelen cometer el error de escogerles una carrera profesional a sus hijos o en tal caso obligarlos a estudiar algo que ellos no quieren simplemente por conseguir algo que ellos no pudieron lograr o hacer en su juventud.
- Si estas atravesando por algún momento incómodo con tus padres como este, entonces es importante que trates de hablar con ellos de la mejor forma posible, ya que esto te ayudará a establecer una comunicación saludable con ellos y así hacerles entender que no te gusta la medicina y que quieres estudiar otro tipo de carrera.
- No es un secreto para nadie que todo padre quisiera tener un hijo médico, pero esto no es suficiente como para que quieran obligarte a estudiar esta carrera si tú no lo quieres. En estos casos simplemente está en ti y en hacerle saber a ellos que es lo que realmente quieres tu para tu futuro y lo que realmente te apasiona. A pesar de que son tus padres debes colocar por encima todo lo que tú quieres hacer y tus sueños, ya que dedicarte a una profesión que no te gusta podría marcar tu vida para siempre.