Es normal que en algún momento de tu vida alguno de tus padres te grite, y aunque es cierto que dependiendo del lugar y del momento puede que sientas mucha vergüenza, también puedes sentirte muy molesto o triste.
Pero cuando se trata de una situación que es a cada rato puedes llegar a tener sentimientos de inutilidad o de inseguridad.
Vamos a ver qué cosas pueden influir en estas situaciones y cómo puedes hacer frente sin faltar el respeto a tus padres.
¿Por qué gritan a veces los papás?
En ocasiones los padres nos pegan esos gritos porque piensan que así los hijos obedecerán, a veces llegan muy cansados a casa de repente estalla una gran pelea de hermanos y para solucionar un asunto, lo más rápido y fácil sea gritar, estas son situaciones más ‘’normales’’ de gritos, pero y si se trata de gritos constante, en ese caso algo que puede ayudarte es investigar más, puede ser que tu padre fue criado en una familia donde los gritos eran lo normal, eso puede hacer que a veces ni se dé cuenta que está gritando, o quizás piensa que gritarte te hará una persona más fuerte para enfrentar los problemas.
Encuentra el por qué del problema
Encontrar el porqué del problema te ayudará a mostrar empatía, cualidad que es vital para cualquier relación de familia, la empatía te ayudará a ponerte en el lugar de tus padres, a imaginarte ¿si yo estuviera en el lugar de mi papa o de mi mama en cómo me sentiría?
También podrás darte cuenta si estás siendo muy susceptible, es decir si te ofendes con facilidad, o puede que descubras que tu padre piensa que los motivos por los que te grita son los mejores. en tales casos ¿cómo puedes enfrentar la situación?
Conócete
Para esto debes auto examinarte sinceramente, puedes preguntarte: ¿tengo la tendencia a ofenderme con facilidad? ¿Cómo reaccioné la última vez que me gritaron? ¿de verdad fue con razón que me gritaron? ¿Qué fue lo que hice? Si la respuesta es: sí, a estas o alguna otra pregunta que te hagas, podrás saber si exageras un poco las cosas o si realmente es un problema al que te estás enfrentando.
¿Cómo hacer frente al problema?
Después de este auto examen, en caso de que seas tú quien tiende a exagerar las cosas, podrías trabajar en controlar tus emociones, y esto es muy importante porque sin importar la edad que tengas te enfrentarás a situaciones donde es importante que no des riendas sueltas a tus sentimientos, así que esto te puede servir de entrenamiento para una situación a futuro.
Y si se trata de que gritan sin ningún motivo, a cada rato, lo primero que debes hacer es tomar valor y hablar de forma calmada y respetuosa con tu padre, busca el mejor momento y un lugar tranquilo y explícale cómo te hace sentir cuando reacciona gritando, expresa tus sentimientos. Explícale que entiendes su preocupación, pero que no te gusta cómo te hace sentir los gritos.
Con respeto, empatía y valor puedes lograr mucho.
Conclusiones:
- Por molestia y para corregir a sus hijos, la mayoría de los padres suelen gritar en forma de regaño. Pero, si esto te pasa continuamente y tu progenitor lo hace en lugares inadecuados y en momentos inoportunos, lo mejor es que sepas como actuar para no sentirte molesto o triste continuamente a causa de ello. Tomando en cuenta que, es posible que esto desarrolle cierta inseguridad en ti como persona.
- Primero que todo, trata de comprender por qué te grita tu padre, ya sea porque se siente cansado de algo incorrecto que haces muy seguido o porque fue criado en un ambiente donde los gritos eran lo normal. De tal modo, podrás puntualizar los principales motivos de esto y comprender por qué sucede tan constantemente. En especial, si logres responderte la siguiente interrogante ¿Si yo estuviera en el lugar de mi padre o madre, como me sentiría?
- Una vez comprendas la situación, es momento de auto examinarte para discernir por qué te hace sentir tan susceptible que tu padre haga eso. De esa manera, podrás saber si eres una persona que se ofende con facilidad o que no reconoce sus errores; lo cual, te permitirá enfrentar el problema de una mejor forma. Por medio de esto, sabrás si es correcto sincerarte con tu padre, tomar valor y expresarle que no te gusta que lo haga, aún y cuando entiendes su posición.