Se debe tomar en cuenta en primera instancia que la carrera que deseas estudiar te gusta verdaderamente, y la accesibilidad de la institución.
Pues, culminar los estudios universitarios será un proceso largo, muy gratificante, pero de mucho sacrificio.
Una vez definida la carrera y la institución a aspirar, consciente de que tus padres han dejado claro que no te la costearan, considera las siguientes opciones que de seguro te ayudaran a buscar la mejor opción para culminar tus estudios:
#1. Buscar trabajo
Lo primero al estudiar en una universidad paga, es buscar una fuente de ingresos que te permita costearla o que te brinden ayuda.
Existen muchas empresas que ayudan a sus trabajadores para crecer, lo ideal sería plantearlo desde el principio para que tus superiores sepan cuáles son tus prioridades.
Si por cuestiones de horario el trabajo te impide asistir a clases presenciales, pudieses solicitar trabajo en la misma universidad.
#2. Tratar de negociar con tu padre
Si el ingreso no resulta suficiente, podrías solicitar exponerle la situación a tus padres, en los que si bien no cancelen la totalidad de la matricula puedan apoyarte en caso de no completar con el resto de los gastos presentes.
De seguro, si les llegas con un plan en proceso a tus padres no se negaran a ayudarte pues están viendo tu esfuerzo.
Otro punto a considerar sería un préstamo a largo plazo con la seriedad que el caso requiere, en la que haya responsabilidad y compromiso con el pago.
#3. Considerar estudiar en una universidad pública
Otra opción, pudiese ser es estudiar en una universidad no paga que no genere mayor gasto. Actualmente, existe una mayor variedad de instituciones que permitirán ajustarse a tu presupuesto.
Cada universidad ofrecer ciertos beneficios que se pueden ver afectados por circunstancias externas que pueden limitar la prestación de ese servicio.
Debes considerar que lo importante no es la institución si no el estudiante. Si decides desarrollar profesionalmente un área serás tú como estudiante el que llegue a posicionarse a pesar de los profesores o instrucciones.
#4. Solicitar ayuda a la universidad
La mayoría de las instituciones ofrecen un sistema de becas que le permiten al alumno costear ya sea toda la matrícula o recibir un gran descuento al respecto.
Así mismo, se puede dar el caso de las ayudantías en las que el estudiante debe estar cierta cantidad de horas en algún área (Biblioteca, administración, etc) con el propósito de cumplir con el pago de la matrícula.
#5. Solicitar un préstamo
En este particular debes considerar tener cómo responder a este préstamo, que el trabajo sea constante y fijo para poder cubrir la responsabilidad.
Considera que en cualquier caso no debes sobrepasar tus límites de gastos, puesto que si no tienes la responsabilidad y atención por cumplir con el pago, desviará la atención de los estudios que es lo primordial.
Muchas personas, intercalan semestre de estudios con semestres de pago, ciertamente, será un poco más largo el proceso pero si es lo que desea estudiar valdrá la pena todo el sacrificio.
Conclusión:
Si, tristemente, tu padre no quiere asumir el gasto de tus estudios universitarios y es una situación compleja que no sabes cómo afrontar en este momento de tu vida; pon en práctica los consejos que te mostramos a lo largo del post. A pesar de que no sientas su apoyo, recuerda que es gratificante obtener logros por sí mismos y en especial, si tiene que ver con la universidad.
Es esencial que estés seguro de que la carrera que has elegido es lo que en realidad te apasiona, para no perder tiempo, esfuerzo ni dinero en algo que después no querrás hacer. Además, opta por averiguar cuál es la universidad más capacitada para ello, así como también, cuál es la que tiene una mayor accesibilidad.
Sé consciente que, debes asumir todos los gastos de tus estudios y por ello, tienes que buscar un trabajo que te permita ganar el dinero que necesitas y al mismo tiempo, distribuir el tiempo de una manera inmejorable para que el empleo no influya en tu desempeño académico. Para minimizar los gastos, es bueno que consideres acceder a una universidad pública, solicitar ayuda a la institución por medio de una beca, hacer un préstamo que sepas que puedes pagar en el tiempo pertinente e incluso, tratar de negociar con tu padre para hacerle entender que es una buena inversión en tu futuro.